INFORME MUNDIAL SOBRE RECURSOS HÍDRICOS EN MONTAÑAS Y GLACIARES
El Día Mundial del Agua del año 2026 estará dedicado al vínculo entre el agua y la igualdad de género, un reconocimiento necesario en un contexto donde los avances en los ODS 5 (igualdad de género) y 6 (agua limpia y saneamiento) siguen siendo insuficientes. La creciente presión sobre los recursos hídricos a nivel global impone desafíos urgentes y sin precedentes que no pueden abordarse sin la participación plena y equitativa de las mujeres.
Actualmente, no más del 22% de los puestos de ingeniería en instituciones del agua son ocupados por mujeres mientras que los espacios de toma de decisión en temas hídricos, en la mayoría de los países, siguen teniendo dominio masculino. Paradójicamente, en muchas comunidades vulnerables, las mujeres tienen un rol clave en la gestión local del agua. Lo hacen de manera no remunerada, invisibilizada y sin acceso a formación técnica, lo que impide que su trabajo sea reconocido y valorizado económicamente.
Estas disparidades revelan desigualdades estructurales que limitan tanto el aprovechamiento del potencial humano como la efectividad de las políticas hídricas. Si bien algunos países muestran reducciones en las brechas de género entre matriculación y graduación en carreras relacionadas con las ciencias del agua, aún es necesario avanzar hacia una participación equitativa de las mujeres. Esto implica fomentar el acceso igualitario a la educación en ciencia e ingeniería, así como garantizar condiciones laborales que promuevan la permanencia y ascenso profesional de las mujeres en igualdad de oportunidades que sus pares varones. Se requiere para ello, un compromiso transformador que combine políticas públicas efectivas y cambios sociales sostenidos.